
Redacción
El problema de Colombia es muy grave más de 160.000 hectáreas sembradas de coca y el mundo desarrollado no puede entender como un Estado, un gobierno permite que miles de campesinos apoyados por bandas delincuenciales, traficantes de droga y consorcios gringos, mexicanos, guatemaltecos, peruanos, etc., sean los que lideran esta iniciativa. Empiezan en Colombia el gobierno a darle cuerpo al retorno de las aspersiones con glifosato, después de que lo ordenó por decreto para erradicar los cultivos de coca, mientras el gigante problema de los campesinos económicos, medioambientales y sociales se vienen.
Hay que entender que la lucha contra el narcotráfico, Colombia uno de los grandes exportadores de cocaína en el mundo, que el glifosato es una medida que erradica el problema del narcotráfico, pero crea otros en lo que tiene que ver con la salud, la calidad de la tierra y la parte económica de los campesinos. Tomar decisiones desde el “aire acondicionado” bogotano es una cosa y ordenar que aviones acompañados de helicópteros y con todo el dispositivo de guerra para su protección aérea y terrestre es otra cosa.

Afectaciones reales
La afectación a los campesinos, a los afro descendientes y a los indígenas, es muy grande y eso no quiere decir que ellos apoyen la coca, no, ellos apoyan su modus vivendi que es otra cosa. El daño ambiental en las fuentes de agua, en los estanques de peces, los cultivos de alimentos, el pasto para ganado es muy grande. Si el campesino recibiera toda la ayuda del Estado, reemplazara la economía del cultivo de la coca, lo que hacen ellos es cultivar en otro lado de la selva, aumentando la deforestación y el problema sigue. Esto es una decisión cortoplacista, para mostrar un resultado de hectáreas de coca fumigadas.
Llevamos más de 20 años fumigando la coca, y el problema sigue allí.Se va a cumplir el mandato de la Corte Constitucional, es cierto, pero el daño seguirá mientras no se tenga una solución completa a los campesinos y a sus familias.
Se argumenta que las fuerzas militares tendrán instrumentos tecnológicos de precisión en los aviones, para controlar la cantidad de fumiga a aplicar, mejores instrumentos para detectar los cultivos ilícitos y así aplicar exactamente, medidas ambientales y verificación posterior en la flora y fauna……..pero el ser humano en su economía presente y en su salud futura es el mayor problema.

La comunidad del Pacífico colombiano va a salir a protestar por la fumigación aérea con glifosato pues el problema seguirá creciendo. El Presidente de la República Iván Duque al firmar el Decreto que reguló la fumigación, indicó que sólo falta el visto bueno del Consejo de estupefacientes de orden nacional y allí empezará la aspersión con glifosato para combatir los cultivos de uso ilícitos.Las condiciones negativas de seguridad, vida, salud y el medio ambiente seguirán creciendo.
El problema es la resiembra y las cifras no cuadran
El Gobierno, mantiene la misma meta de erradicación de cultivos ilícitos de 2020, 130.000 hectáreas de droga bajo la reanudación de aspersión con glifosato., se debe reconocer que hay un fortalecimiento en las regiones cocaleras, se erradicaron manualmente 94.000 ha. y a través del Programa Nacional Integral de Sustitución de Cultivos Ilícitos (PNIS) otras 40.000 ha., para un total de 134.000 ha. aproximadamente. La productividad de la erradicación aumentó en un 83 por ciento, al pasar de 83 hectáreas diarias en 2020 a 152 en 2021”, dijo el ministro de justicia Wilson Ruiz, quien reiteró el llamado que desde hace tiempo viene haciendo el gobierno nacional para aplicar todas las herramientas posibles -incluidas las aspersiones aéreas- en la lucha contra

El año pasado fue exitoso, en 130.000 hectáreas erradicadas manualmente, pero la resiembra ha hecho que la reducción sea casi nula.Comunidades ambientalistas, organizaciones no gubernamentales y la política de izquierda y derecha con sus opositores van a los tribunales para buscar oponerse a la fumigación, la tutela será una de las estrategias, pero el gobierno cree que con el decreto ya se blindo. En el mismo establece que la única instancia que la resolverá será el Consejo de Estado, Decreto 333 del 6 de abril de 2021. El argumento legal es el tema de la seguridad nacional.
La aspersión con glifosato no afectara el sistema del parque nacional natural y de los parques naturales regionales, los ecosistemas estratégicos como paramos, humedales, categoría ranzal y manglares, los cuerpos de agua y los centros poblados.
A los 2 años y 7 meses, el gobierno de Iván Duque comienza la aspersión con glifosato, y la última palabra la tiene el Consejo de Estado.