*Edirotial
El Ministerio de Hacienda presentó un proyecto de ley que permitirá crear empresas especializadas en pagos, ahorros y depósitos sin colocación de dinero. Las cuentas corrientes y de ahorros se podrán abrir hasta con $2 millones exentos del gravamen del 4 x 1000. Esta es una buena noticia para los Colombianos y seguramente se convertirá en Ley de la Republica antes del 20 de Junio de 2014, fecha en la que termina la actual legislatura ordinaria del Congreso de la República.
Abrirá una competencia nueva a las casas de giros, Servientregas, Ganes y demás entidades que están prestando un gran servicio popular para pagar o remitir dineros, pero costosos
En otras palabras se le abrirá una competencia nueva a las casas de giros, Servientregas, Ganes y demás entidades que están prestando un gran servicio popular para pagar o remitir dineros, pero costosos. Los bancos podrían crear nuevas sociedades especializadas en pagos, ahorros y depósitos (PAD), precisando que no podrán prestar plata. Los depósitos o ahorros serán consignados por las sociedades PAD en el Banco de la Republica o en bancos comerciales y servirán para hacer giros y transferencias a quien demande este servicio.
La idea del Ministro Mauricio Cárdenas, que se encuentra en la comisión III económica del Senado de la República, es muy buena pues permitirá reducir el valor de estos giros que actualmente son muy altos, pero que al ser entidades “bancarias” sin grandes estructuras, costos administrativos y con gran competencia, serán obligadas a reducir la intermediación para giros y remunerar bien los ahorros, para bien de la comunidad.
Se proyecta disminuir la informalidad que existe en Colombia en este aspecto y que ha permitido abusar de ciertos servicios que debe regular efectivamente el Estado
De esta manera se proyecta disminuir la informalidad que existe en Colombia en este aspecto y que ha permitido abusar de ciertos servicios que debe regular efectivamente el Estado, por ello la inclusión financiera es prioritaria para mejorar el servicio bancario a los pobres, eliminando en la práctica el gota a gota y los créditos costosísimos que abundan en el país. Por ello el ingreso al sistema financiero podría apoyar al indefenso ciudadano de bajos ingresos, vulnerable al crédito informal salvaje.
Las microfinanzas y el crédito popular se tienen que convertir no en una fuente de financiamiento sino en un desarrollo micro empresarial productivo para mejorar su calidad de vida y en consecuencia incrementar el auge de la economía productiva colombiana, como tienen muchos países asiáticos.
El Presidente Santos ha sido claro en bajar los costos financieros, pero urge un acuerdo Nacional sobre el crédito popular y barato
El Presidente Santos ha sido claro en bajar los costos financieros, pero urge un acuerdo Nacional sobre el crédito popular y barato, un sistema bancario que tenga mayor conocimiento de de los clientes potenciales, para que se ofrezcan productos financieros al alcance de los más necesitados. Esa es una tarea inaplazable del nuevo gobierno que debe iniciar el próximo 7 de Agosto, reelegido o no el Presidente de la República.
Pero el inicio con una mayor formalización de una actividad, que permite dar mejor servicio y seguramente proyectará con una malla financiera menos concentrada, la socialización del crédito en Colombia, para que incida con fortaleza en el PIB del país y porque no, en la disminución de tanta informalidad laboral, que hacen confundir las cifras oficiales de un digito del desempleo. Bienvenidos los nuevos “bancos” colombianos.