Skip to content
Archivo Caliescribe
Archivo Caliescribe
  • Confidenciales
  • Cali: Ciudad y ciudadanos
  • Reporte urbano
  • Política
  • Economía
  • Deporte
  • Columnistas
  • Archivo
  • Ver contenidos recientes
Archivo Caliescribe
EDVDFB

La importancia del servicio

Héctor de los Ríos, 20 October, 2018

P. Héctor De los Ríos L.

Vida nueva

29 domingo del tiempo ordinario

Evangelio: San Marcos 10,35-45

Nos habla el evangelio de dos discípulos conocidos: Santiago y Juan. Son hermanos, forman parte del primer grupo de compañeros de Jesús,  se los llama con el sobrenombre de «boanerghes» («hijos del trueno»;  Eran por tanto de carácter algo impetuoso.

Quieren asegurarse el futuro en este mundo y ser tenidos en cuenta para ocupar los mejores puestos. En el fondo sus sueños son cortos y caducos. Cristo, quien es la mayor identificación del Siervo del Señor, ha anunciado en tres ocasiones su muerte futura. El camino que hace porfiadamente hacia Jerusalén lo lleva a esa muerte. Sus discípulos, soñando un mundo distinto, lleno de posibilidades terrenas, de un reino donde hay puestos importantes para ocupar, no entienden lo que Cristo les propone: estar dispuestos también ellos a compartir la misma suerte, a dar la vida muriendo en beneficio de la humanidad

Está claro que tienen ambiciones notables. Se ve que no han entendido nada de lo que Jesús estaba por hacer. Se preparaba a la ignominia de la cruz, y ellos todavía no lo habían entendido.

La respuesta de Jesús los confronta con la realidad del mundo que han elegido al seguir, libre pero confiadamente, a Cristo. No es el mundo de honores pasajeros y perecederos sino la consagración para siempre como servidores desinteresados pero eficaces de la humanidad. Los invita a ser como él: «¿Pueden beber la copa que yo voy a beber?»

El verdadero poder de Jesús no consiste en distribuir los puestos de honor, sino el de hacer que se participe en su trágico destino: «La copa que yo voy a beber, sí la beberán y también serán bautizados con el bautismo con que yo voy a ser bautizado;  pero, sentarse a mi derecha o a mi izquierda no es cosa mía el concederlo, sino que es para quienes está preparado».

El diálogo sobre la «copa» y el «bautismo» está en evidente paralelismo. Pero no se entiende cómo los dos puedan beber el cáliz y ser bautizados, si no es pensando en el martirio que sufrirán (ambos) màs tarde. A través de las dos imágenes, Jesús parece evocar sin duda su muerte violenta, que Él presagia como una obligación absoluta de fidelidad hacia al Padre.

«Al oír esto los otros diez, empezaron a indignarse contra Santiago y Juan ». La ambición personal daña el ambiente comunitario y origina rivalidades. Hay que recordar que también los otros comparten la misma ambición, pues en otra ocasión estuvieron discutiendo sobre los primeros puestos o sobre «quién de ellos era el más importante». Y el Señor tuvo que enseñarles a todos que era la humildad (como «niños») y el servicio a los demás lo que hace grande e importante a alguien en el Reino de Dios.

Por tanto, el enojo de «los otros» demuestra que ellos tienen la misma mentalidad y los mismos sentimientos que Santiago y Juan. ¡Cuánto le cuesta al Maestro purificar las mentes rudas de sus Apóstoles y elevarlas al Mesianismo de la Redención! Ellos, que van a ser en el «Reino» Mesiánico los jefes, han de tener de la autoridad un concepto totalmente diverso del que se tiene en los otros «reinos».

Así como El, «Rey» del «Reino Mesiánico», es el «Siervo de Yahvé» y el «Servidor de todos» que da la vida para salvar a todos, del mismo modo quienes en su «Reino», en su Iglesia ejerzan autoridad, no la tienen para dominar despóticamente, sino para servir; servir hasta dar la vida por las ovejas que tengan encomendadas.

La autoridad en la Iglesia es un «servicio» que prolonga la entrega y la Pasión de Jesús, en orden a hacer llegar la eficacia de su Redención a todos los hombres. El Mesianismo de Jesús es «divinizar» todo lo humano. Por eso oramos así en la Eucaristía de este Domingo: «Concédenos, Señor, que al frecuentar los celestes misterios progresemos en la gracia; que sintamos tu auxilio en los asuntos temporales y quedemos más instruidos en el valor de los bienes eternos» (Oración después de la Comunión).

«Saben que los que son tenidos como jefes de las naciones, las dominan como señores absolutos y sus grandes las oprimen con su poder. Pero no ha de ser así entre ustedes, sino que el que quiera llegar a ser grande entre ustedes, será su servidor, y el que quiera ser el primero entre ustedes, será esclavo de todos»

Se refiere a los dirigentes políticos de su tiempo: que en el fondo es el estilo de todos los tiempos. Por el contrario, la comunidad de los discípulos debe ser dominada por el servicio: esto está expresado con dos términos que indican graduación. Se habla de «siervo» (diakonos:  y de «esclavos» (doulos:  No se puede escoger a quién servir: se debe ser esclavo de todos, cambiando el esquema mundano.

«El Hijo del hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y a dar su vida como rescate por muchos». Él se merecía, como Hijo de Dios, todos los honores posibles. Pero se despojó y optó por un camino doloroso, el de la Cruz. Es muriendo en ella donde va a ser glorificado no con una gloria humana sino con la que le dé su Padre Dios. Lo resume en una frase para recordar siempre, sobre todo cuando sufrimos el halago de los honores: «El Hijo del Hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y a dar su vida como rescate por muchos». Hace de su sacrificio y de su muerte la máxima expresión del servicio.

Jesús nos ha dado ejemplo en todos los campos: su anuncio del Reino como Palabra salvadora, sus obras compasivas con los enfermos y necesitados, su compartir de corazón las tristezas, como cuando lloró por su amigo difunto, pero sobre todo su muerte en cruz para la salvación de la humanidad, han sido las muestras de su servicio. Ante él sería vergonzoso pedir puestos como lo pretendían los hijos de Zebedeo, en lugar de asumir su misión de entrega de la vida por los amigos que se aman que para él son todos los hombres y mujeres de todos los tiempos y lugares.

Morir por alguien puede tener dos sentidos: o morir en beneficio de alguien o morir en sustitución de otro. Un santo del siglo pasado, el sacerdote Maximiliano Kolbe, se ofreció a morir por un hombre que debía ser sacrificado en tiempos de la persecución nazi. Lo sustituyó en el sacrificio para que viviera a favor de su familia. La Iglesia lo canonizó abismada ante la grandeza de su sacrificio. Esta muerte no habría podido darse si antes no se hubiera dado otra, la de Jesucristo, el justo y sin pecado, en beneficio de toda la humanidad.

Uncategorized

Post navigation

Previous post
Next post

Esta viendo los contenidos del archivo histórico de Caliescribe entre abril 2011 y noviembre de 2023.

Ver contenidos recientes
  • November 2023 (108)
  • October 2023 (171)
  • September 2023 (162)
  • August 2023 (142)
  • July 2023 (163)
  • June 2023 (113)
  • May 2023 (116)
  • April 2023 (141)
  • March 2023 (110)
  • February 2023 (106)
  • January 2023 (94)
  • December 2022 (99)
  • November 2022 (143)
  • October 2022 (138)
  • September 2022 (97)
  • August 2022 (130)
  • July 2022 (124)
  • June 2022 (118)
  • May 2022 (109)
  • April 2022 (120)
  • March 2022 (106)
  • February 2022 (101)
  • January 2022 (104)
  • December 2021 (84)
  • November 2021 (152)
  • October 2021 (246)
  • September 2021 (209)
  • August 2021 (168)
  • July 2021 (203)
  • June 2021 (175)
  • May 2021 (177)
  • April 2021 (132)
  • March 2021 (147)
  • February 2021 (134)
  • January 2021 (87)
  • December 2020 (90)
  • November 2020 (138)
  • October 2020 (151)
  • September 2020 (135)
  • August 2020 (183)
  • July 2020 (179)
  • June 2020 (185)
  • May 2020 (177)
  • April 2020 (171)
  • March 2020 (181)
  • February 2020 (196)
  • January 2020 (127)
  • December 2019 (158)
  • November 2019 (173)
  • October 2019 (179)
  • September 2019 (167)
  • August 2019 (198)
  • July 2019 (168)
  • June 2019 (192)
  • May 2019 (167)
  • April 2019 (161)
  • March 2019 (203)
  • February 2019 (168)
  • January 2019 (162)
  • December 2018 (180)
  • November 2018 (188)
  • October 2018 (185)
  • September 2018 (221)
  • August 2018 (175)
  • July 2018 (206)
  • June 2018 (230)
  • May 2018 (237)
  • April 2018 (198)
  • March 2018 (218)
  • February 2018 (175)
  • January 2018 (169)
  • December 2017 (202)
  • November 2017 (189)
  • October 2017 (198)
  • September 2017 (224)
  • August 2017 (194)
  • July 2017 (206)
  • June 2017 (197)
  • May 2017 (196)
  • April 2017 (215)
  • March 2017 (185)
  • February 2017 (130)
  • January 2017 (108)
  • December 2016 (162)
  • November 2016 (126)
  • October 2016 (170)
  • September 2016 (149)
  • August 2016 (145)
  • July 2016 (152)
  • June 2016 (140)
  • May 2016 (114)
  • April 2016 (166)
  • March 2016 (137)
  • February 2016 (149)
  • January 2016 (168)
  • December 2015 (142)
  • November 2015 (149)
  • October 2015 (208)
  • September 2015 (168)
  • August 2015 (188)
  • July 2015 (161)
  • June 2015 (149)
  • May 2015 (161)
  • April 2015 (143)
  • March 2015 (142)
  • February 2015 (148)
  • January 2015 (161)
  • December 2014 (155)
  • November 2014 (174)
  • October 2014 (149)
  • September 2014 (149)
  • August 2014 (164)
  • July 2014 (150)
  • June 2014 (141)
  • May 2014 (170)
  • April 2014 (145)
  • March 2014 (171)
  • February 2014 (128)
  • January 2014 (120)
  • December 2013 (116)
  • November 2013 (179)
  • October 2013 (143)
  • September 2013 (146)
  • August 2013 (157)
  • July 2013 (150)
  • June 2013 (163)
  • May 2013 (155)
  • April 2013 (128)
  • March 2013 (141)
  • February 2013 (127)
  • January 2013 (112)
  • December 2012 (149)
  • November 2012 (120)
  • October 2012 (130)
  • September 2012 (189)
  • August 2012 (132)
  • July 2012 (122)
  • June 2012 (145)
  • May 2012 (134)
  • April 2012 (126)
  • March 2012 (146)
  • February 2012 (120)
  • January 2012 (137)
  • December 2011 (151)
  • November 2011 (131)
  • October 2011 (142)
  • September 2011 (124)
  • August 2011 (133)
  • July 2011 (151)
  • June 2011 (122)
  • May 2011 (141)
  • April 2011 (77)
©2025 Archivo Caliescribe | WordPress Theme by SuperbThemes